La erupción de las muelas del juicio es la fase final del desarrollo de la dentadura de las personas, que se produce entre los 18 y 25 años, aproximadamente, y que causa un temor generalizado debido a la creencia de que esto conlleva una cirugía para extraerlas. Desde nuestra clínica dental en León vamos a desmentir esta afirmación y te vamos a contar cuáles son los casos que requieren una extracción de las muelas del juicio. ¡Sigue leyendo!
Lo primero que debes saber es que puede ocurrir que una persona no tenga alguna de estas muelas o que nunca llegue a salir. Por otro lado, su erupción no siempre provoca dolor ni obliga a su extracción, sino que, en ocasiones, estas crecen correctamente en la cavidad oral y se alinean con otros dientes.
Los casos en los que se requiere la extracción de las muelas del juicio son:
- Apiñamiento dental: se produce cuando no existe suficiente espacio en la mandíbula para crecer correctamente, lo que fuerza el movimiento de los dientes y hace que se superpongan.
- Impactación: esto ocurre si las muelas quedan atrapadas debajo de las encías y salen parcialmente, provocando dolor e inflamación.
- Caries y enfermedades periodontales: si los molares erupcionan de manera incorrecta resulta más complicado acceder a ellas durante la higiene oral, lo que favorece la acumulación de placa bacteriana y, por tanto, la aparición de caries y el desarrollo de gingivitis, entre otras patologías.
En definitiva, en todos aquellos casos en los que el crecimiento de las muelas del juicio es incorrecto o provoca dolores o molestias, lo más conveniente será retirarlas para evitar problemas de salud oral.
Si te están saliendo y presentas alguna molestia debes pedir cita para venir a visitarnos a nuestra clínica dental en León y nuestro equipo de odontólogos valorará el procedimiento a seguir en cada caso.